“We'll never be those kids again…”
El amor está siempre presente en la música, al igual que su contraparte, el desamor. Hablar de ellos siempre lleva una carga emocional importante, tanto así que a veces no expresamos lo que sentimos con palabras, sólo le damos play a una canción que parece que nos entiende a la perfección. Pero ¿qué pasa con todo lo de enmedio? Cuando una relación amorosa es de “jalar y estirar”, que puede que suceda pero puede que no, que ya terminó pero que tu mente sigue junto a esa persona…
Viniendo desde lo desconocido, siendo el escritor fantasma de Justin Bieber y Beyoncé mientras formaba parte del colectivo Odd Future, logró ser firmado por Def Jam, pero sin la autorización de lanzar música, habiendo sólo lanzado “nostalgia, ULTRA”, su primer mixtape que lo pondría en el ojo de la industria.
Al ver esto, Def Jam le autorizaría lanzar música, siendo Channel Orange su primer álbum que lo haría ganador de un Grammy. Con un contrato de dos álbumes y las pocas ganancias que obtuvo Frank por Channel Orange, se le ocurrió una grandiosa idea.
Con un presupuesto destinado a su segundo álbum, Frank produjo dos álbumes, el primero sería un performance en video titulado Endless, con esto el cumpliría con su contrato y sería libre de las garras de Def Jam.
El proyecto en el que en realidad había invertido la mayor parte del presupuesto, fue en la producción de Blonde, un álbum lanzado desde un sello discográfico creado por el mismo Frank, donde también estaba una revista. Al inicio se creyó que Boys Don’t Cry, sería el nombre del nuevo álbum, cosa que no fue cierta.
Blonde tomó a todos por sorpresa, siendo lanzado al día siguiente de Endless, y teniendo un lanzamiento en físico en ciertas tiendas donde se podría comprar la revista Boys Don’t Cry, donde además del disco venía material adicional, stickers y algunas entrevistas.
Blonde no tardaría en convertirse en un absoluto hit, y pronto entraría en el gusto del público en general, que fue cautivado con su proyecto de channel ORANGE, el segundo álbum que tuvo éxitos cómo Thinking bout you, Pyramids y Bad Religion.
Al inicio se creyó que sería un álbum con buena música y ya, una que otra canción con un trasfondo profundo y ya, pero con el tiempo, nos iríamos dando cuenta que lo que Frank Ocean transmitía en Blonde iba más allá de sólo ser profundo y contar un par de experiencias reales.
Hay mucho que decir sobre Blonde, primero comencemos por lo más conocido, el álbum está compuesto de dos partes, cada una de 30 minutos, el cuál es dividido a la perfección en la transición de la canción Nights.
El que este álbum esté dividido en dos partes nos deja mucho que pensar, el dividir la historia del álbum marca el cambio y la evolución que viene cuando maduramos, pasar de vivir en la melancolía y nostalgia a buscar vivir mejor y estar en paz con nosotros.
Otros dicen que está dividido así para comprender el cambio en la carrera artística de Frank, pues al inicio escuchamos también una voz más aguda en varias canciones, reflejando lo inmaduro que Frank era cómo artista y persona, contando algunas experiencias que vivió de niño y adolescente. En la segunda mitad ya escuchamos a Frank con su voz sin alterar, historias de reflexión sobre el pasado y cómo se siente ahora que ha logrado el éxito.
Otra curiosidad es que en la portada del álbum está escrito “blond”, mientras que el título oficial del álbum es “Blonde”, lo que sería un guiño a la bisexualidad de Frank y cómo se percibe dentro de esta dualidad y la dualidad del álbum en si.
Una teoría describe que cada canción del álbum tiene su contraparte, esto tomando en cuenta que Nights divide el álbum a la mitad y es la primer y última canción. Ivy tiene como contraparte a Solo (reprise), en Ivy escuchamos como Frank se arrepiente de haber terminado una relación y en Solo, André habla sobre tenerle rencor a alguien al mismo tiempo que la extrañas.
Y así con todas las canciones, he de ahí que también venga lo maravilloso de este álbum, entre más lo escuchas y le pones atención, más cosas le encuentras.
Este álbum es de lo más personal que le hemos escuchado a Frank, pues en la última canción escuchamos una pequeña entrevista donde habla su hermano, quien falleció hace un par de años. Ryan Breaux era muy querido por Frank, y en esta canción nos damos cuenta de que Ryan veía a su hermano cómo una inspiración. Al final de la canción, “Futura Free”, escuchamos la pregunta de “¿a qué distancia está un año luz?”, la respuesta es 9.4×1012 km, y la canción dura 9 minutos con 24 segundos, siendo esta pregunta una reflexión acerca de cuán lejos hemos llegado cómo personas, y qué tan lejos llegaremos...
Blonde es toda una experiencia auditiva que tienes que vivir si o si. Las canciones son profundas y te llevan de la mano en esta historia que Frank nos cuenta canción a canción.
Las reflexiones sobre la mortalidad, el desamor, las malas experiencias en el amor, son descritas de una manera casi perfecta, Frank da en el clavo cuando se trata de envolverte y contarte una historia.
En cada canción vas a encontrar un verso que te dejará pensando o con la boca abierta de asombro, y hay de todo tipo, “I’m sure we are tall in other dimension”, “Summer’s not as long as it used to be”, “So why not spend this flammable paper on the film that's my life?”, y así muchísimos más versos.
Blonde se siente cómo una noche en tu cuarto a oscuras, y después estás en un paisaje lleno de árboles que filtran la luz del sol, estás en paz contigo sabiendo que has logrado muchas cosas, y que aún falta mucho más por hacer, porque esta es tu vida y lo que quieras hacer, lo podrás hacer, ya te lo has demostrado en muchas ocasiones, sólo hace falta que te decidas a hacerlo...
Sin más que decir, Blonde:
Justo este año tendremos, si todo sale bien y Frank no cancela, el regreso de Frank Ocean a los escenarios. Será en la edición de este año del Coachella, así que si tienes la oportunidad de escucharlo en vivo, no te la pierdas, lo podrás ver en vivo desde Youtube.
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Nos leemos en una próxima ocasión, ¡hasta pronto!