The Beatles, banda conocida como “El cuarteto de Liverpool”, tiene una amplia producción musical que va desde covers de canciones clásicas del rock & roll, hasta composiciones originales que le han dado la vuelta al mundo y que han sido grandes éxitos.
La lista de hoy se compone de 10 canciones que pertenecen a The Beatles y que su gran ritmo es ideal para terminar y/o empezar el año con estilo, con la música a todo volumen y con la energía a tope.
Las primeras dos canciones se pueden encontrar en su álbum Let It Be (1970). En primer lugar, se encuentra Get Back, una canción cantada por Paul McCartney y John Lennon, con solos de guitarra de George Harrison y el mismo Lennon, la batería excepcional de Ringo Starr y el acompañamiento de Billy Preston en el piano. Get Back es una de las canciones más emblemáticas de la banda, especialmente por el bien conocido concierto en la azotea, donde esta canción se tocó frente a un público por primera vez.
En segundo lugar está One after 909, canción interpretada por McCartney y Lennon que rescata el ritmo del rock & roll que caracterizó a esta banda en sus inicios, sin embargo, en esta ocasión cuenta con el elemento adicional del piano de Billly Preston, quien complementa perfectamente el ritmo pegajoso y movido que le da vida a esta gran canción.
La tercera canción pertenece al álbum Abbey Road (1969), se trata de Come Together, donde nuevamente las voces de Lennon y McCartney son las que sobresalen entre la instrumentación compuesta por guitarras eléctricas y una batería que resalta el sonido de los platillos en algunas partes, dándole a la canción un toque metálico y electrizante que hace que sea imposible no cantar o moverse al empezar a escuchar la melodía.
La cuarta canción es Taxman, la cual se encuentra en el álbum Revolver (1966) y que de hecho es la canción que abre el disco. Esta vez es George Harrison quien lleva la voz principal mientras que el resto del grupo le ayuda haciendo coros en ciertas partes de la canción. La base musical se vale de la batería de Starr que en ocasiones se oculta detrás de dos guitarras escandalosamente rockeras.
Las siguientes dos canciones están en el álbum Rubber Soul (1965). La primera es Drive My Car donde McCartney y Lennon lleva la voz principal y Harrison participa en un segundo término. Al ritmo pegajoso de las guitarras y la batería, se suma un pandero muy alegre que contagia la alegría y la energía que caracterizan esta canción. En una línea muy similar se encuentra Think For Yourself, una canción que suena muy alegre para en realidad hablar de un reclamo romántico. Ambas canciones podrían fácilmente estar en esa lista de reproducción a la que se le sube el volumen para disfrutarla de mejor manera y que una vez que empiezan, es imposible quitarlas.
Por último, hay dos canciones en A Hard Day’s Night (1964) que, aunque no cuentan con los arreglos musicales sofisticados que tienen las anteriores debido al año en que fueron lanzadas, son magníficas en cuanto al ritmo contagioso y a la energía que desprenden los instrumentos y los integrantes de la banda al momento de cantar, invitando así, no sólo a cantar, sino también a bailar y subir el volumen. Una de estas canciones es When I Get Home, donde la voz de Lennon se hace inmediatamente presente y es acompañada por un ritmo que tiene toques del rock & roll de la época, lo cual se percibe es las guitarras y en la batería. La segunda es I Should Have Know Better la cual empieza con una armónica muy alegre y que se va a estar haciendo presente a lo largo de toda la canción, acompañando así al resto de los instrumentos.