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Foto del escritorLupita Guillén

A rainy day in New York: Música para disfrutar cuando llueve



La película de Woody Allen, A rainy day in New York (2018), tiene como protagonista a un amante del jazz, quien a su vez vive enamorado de la vieja Nueva York. Así, a lo largo de la cinta, no sólo vemos a este personaje y sus coprotagonistas meterse en todo tipo de enredos durante un fin de semana a la ciudad, sino que también vamos escuchando maravillosas piezas de jazz que van conectando con las emociones y los hechos que la historia muestra.


A pesar de la gran variedad de melodías y ritmos que componen este soundtrack, y que nos llevaría a pensar que hay muchos artistas detrás de esa música, la realidad es que la mayoría recae en dos jazzistas, Erroll Garner y Conal Fowkes; y el tema inicial de la película es interpretado por Bing Crosby.


Así que demos un breve recorrido por las canciones de estos talentosos músicos que seguramente terminarán por darte la sensación de estar en algún momento del pasado, y si llueve mientras esto ocurre, aún mejor, pues el jazz y la lluvia son una combinación deliciosa.


Erroll Garner


Red sails in the sunset

Así como Woody Allen busca entretener y divertir al público, Erroll Garner busca contagiar el buen humor pasando sus dedos por el teclado del piano, acertando en las notas que marcan un ritmo pegajoso, hipnótico, difícil de dejar de escuchar y que se puede disfrutar en cualquier momento del día. Red sails in the sunset, es una canción de corta duración, pero con eso basta para que nos enamoremos de ella y entendamos por qué el protagonista de la película está tan obsesionado con el jazz.



The best things in life are free

Lo que parece un golpeteo a las teclas de un piano sin aparente sentido, termina por convertirse en una melodía alegre, capaz de levantarle el ánimo a cualquiera, y justo de eso se trata esta canción, de ver ese lado positivo y alegre de la vida en todo momento. Dentro de la película, esta canción suena más de una vez, logrando en cada una de ellas poner ese toque simpático a la escena, como si se tratara de un personaje más.



Will you still be mine

Siguiendo con este buen humor, esta canción, con su ritmo mucho más rápido que la anterior, en poco más de seis minutos, consigue contagiarnos la alegría y la energía que se desprenden de esas teclas de piano acompañadas por una batería que logra percibirse a veces más a veces menos. Esta canción también aparece más de una vez dentro de la película, acentuando un poco lo cómico o lo absurdo de la situación que se muestra en escena.



Undecided

Esta canción pareciera ser una continuación de la anterior, con la excepción de que en Undecided el ritmo del piano es un poco más rápido, pero eso no importa, se disfruta de la misma manera.



That’s my kick

Por si las canciones anteriores no son suficiente dosis de energía y buen humor, aparece That’s my kick como cereza del pastel, por lo menos en lo referido a Erroll Garner. Esta canción tiene un ritmo sumamente pegajoso, no sólo por el piano, sino también por el bajo y la batería que van marcando la base de la melodía de una manera sensacional, pudiendo escuchar los tres instrumentos con detalle a lo largo de los casi tres minutos de duración.



I’ve got the world on a string

Para bajar un poco el ritmo, relajarnos y disfrutar un poco más del momento, llega esta canción más lenta y suave, donde, a diferencia de canciones anteriores, el sonido de la batería se distingue de principio a fin como fiel acompañante del piano, dando como resultado una melodía agradable al oído, ideal para esos momentos en que se quiere pausar la vida diaria y descansar un poco.



Misty

Y para terminar de relajarnos y añadir un toque de nostalgia a la situación, tal como pasa en la película, aparece esta obra maestra. Los sonidos suaves del piano que mezclan un poco de notas graves con agudas para dar ese sentimiento de anhelo, resulta verdaderamente agradable al oído. Además, la mezclade momentos más rápidos y momentos más lentos, convierten a esta canción en una de las mejores de este soundtrack.



Conal Fawkes

Así como Erroll Garner es el encargado de subir el ánimo y la energía con su piano, Conal Fawkes, nos baja para relajarnos. Desafortunadamente, sus canciones no son fáciles de encontrar, así que sí quieres escuchar un poco más de él, no será tan sencillo hacerlo.


Everything happens to me

Esta es la primera canción que escuchamos de Conal, y aparece en más de una ocasión a lo largo de toda la película, lo cual tiene todo el sentido del mundo, pues en una película donde cualquier cosa le puede pasar a los personajes, una canción que habla de eso en su título, es indispensable. Y tal es la importancia de esta canción dentro de la historia que Timothée Chalamet, quien encarna al personaje principal, toca y canta esta canción en una escena. Si la melodía te suena familiar, seguramente la has escuchado en una de sus interpretaciones más conocidos a cargo de Chet Baker.


Los tonos suaves y el ritmo lento de la canción, dejan una marca difícil de superar, pues una vez que se escucha esta canción, sin importar en qué versión, es imposible no regresar a ella en algún momento de la vida.



They say It’s wonderful

Otra canción que seguramente has escuchado si te gusta Doris Gray o si has visto Spider-man 3 y recuerdas la escena donde Mary Jane canta mientras baja de unas escaleras. Pues bien, compuesta por Irving Berlin e interpretada por Conal Fowkes, esta canción se centra en puros ritmos lentos, ideal, por lo tanto, para un momento de relajación profunda, pues no habrá momentos de estruendo que sorprendan ni cambios de velocidad que nos saquen de nuestra zona de confort.



Bing Crosby

Finalmente pasamos al tema principal de la película: I got locky in the rain de Bing Crosby, la cual es la primera canción que escuchamos dentro de la cinta, pues aparece acompañando los créditos iniciales. Al igual que Everything happens to me, esta canción también tiene su peso dentro de la historia, pues la lluvia, dentro de la historia, trae consigo nuevas experiencias y emociones para los personajes.


La canción es tranquila, aunque no tanto como las dos canciones de Conal Fowkes, y la voz grave del cantante, le da un toque perfecto de nostalgia que termina creando la atmósfera perfecta para hacernos sentir en otra época.


Ahora que tienes esta maravillosa selección musical, ve por tus audífonos, tu bebida favorita y ponte cómodo para disfrutar un poco de jazz.




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