Churupaca es un grupo argentino conformado por Juana Aguirre, Fefo Selles, Pablo Viru Tirachio, Ricardo Borreta, Darío Bercovich y Joaquín Gutiérrez. Su aventura musical como Churupaca comenzó hace diez años con el objetivo de no encasillarse dentro de un género y es verdad que la primera vez que los escuché me llamó la atención la mezcla de estilos y de instrumentos que coexistían.
Pienso que hoy en día es difícil catalogar a las bandas desde una perspectiva “purista” en cuanto a géneros musicales se trata, pero para mí, este grupo argentino ha sabido destacar en esta búsqueda de la “no clasificación”. La clave es que cada uno de los integrantes de Churupaca viene de corrientes y gustos musicales diferentes pues escuchamos tintes de reggae, folklor, música klezmer, rock,etc.
Su primer trabajo discográfico lleva el nombre de la misma banda y vio la luz en 2013. A lo largo de las trece canciones que lo conforman, vemos el talento de Churupaca para adentrarnos en diversas atmósferas gracias a esta mezcla de géneros. Pero, considero que la sensación que más predomina es la de un corte festivo. Para ellos, la música es ante todo una manera de disfrutar la vida. Sus canciones son como una especie de viaje lleno de gozo, relajación y diversión.
Por ejemplo, en el caso de la primera canción Eterno Retorno pareciera que estamos en una especie de espectáculo circense: nos acompaña una música divertida y animada que incluso contrasta con la letra: ¡Ay, tanto tiempo sin ver el sol! , que ha dejado en mí su última canción, que me fulmina y va así, que ha dejado en mí su última canción… Los cambios de ritmo a lo largo de la canción nos mueven de la felicidad a la melancolía.
Posteriormente, en el año 2018, salió su segundo disco: Antes de mañana. Este álbum muestra un cambio radical en cuanto al aura que transmiten. Si bien, la fusión de géneros sigue presente, no así el aire festivo. Los cinco años de espera entre un disco y otro reflejan el gran trabajo que conllevó la producción de su nuevo material.
Ahora, Churupaca nos ofrece quince canciones, por lo que se trata de un disco largo que hay que disfrutar lentamente y con atención. Nos enseñan a disfrutar la música desde una perspectiva diferente, pareciera que nos piden un oído mucho más activo para poder percibir cada elemento musical. Me atrevo a decir que es una música mucho más “sabrosa” que el primer disco. A diferencia de éste que nos daba una adrenalina constante, Antes de mañana nos da la oportunidad de verdaderamente gozar el paso del tiempo gracias a la música.
La canción Tiempo de sanar es un ejemplo de lo anterior. La letra y el percusiones a lo largo de la canción nos envuelven en una atmósfera mística : si no me ves rogándole al sol y la luna pa’ ver esta bruma clara de los escombros nace mi cuerpo sincero hoy, que nos conduce a un estado de tranquilidad y reflexión, como si de un encanto se tratara.
Hay muchas otras razones por las que les recomendaría escuchar la propuesta musical de Churupaca, pero pienso que la principal razón es precisamente el viaje musical que constantemente realizan. Sus expediciones por los distintos géneros musicales les permiten tomar lo mejor de ellos sin encasillarse en uno y eso les otorga una esencia mística y original. Para mí es un deleite constante pues cada canción es muy diferente de la otra por lo que nunca me resulta aburrido escucharlos.