La película de Disney, Cruella, dio mucho de qué hablar debido al vestuario utilizado, así como por la sorprendente actuación de Emma Stone en el papel protagónico. Sin embargo, la historia de uno de los villanos más icónicos de Disney no es la excepción.
El soundtrack de Cruella, no sólo está compuesto por los arreglos instrumentales de Nicholas Britell quien exalta las emociones de los personajes de la historia, sino que también cuenta con una asombrosa selección musical que incluye diferentes canciones que van de los 60’s a los 90’s. Dicho esto, debido a que la lista es muy amplia, aquí sólo mencionaremos las canciones utilizadas en las escenas más representativas de esta película.
Comencemos por la introducción de nuestra protagonista. La película comienza hablando sobre la infancia de Estella y el origen de su apodo, Cruella. Para esta parte el fondo musical es Bloody well right de Supertramp, una canción que es puramente instrumental durante casi la mitad de su duración, pero que refleja el sentido de estilo que va a definir al personaje más adelante, pues su ritmo tranquilo con toques de jazz combinadas con algunas partes estridentes que se convierten en un estilo roquero, representan la infancia de nuestra protagonista: tranquila hasta que todo cambia.
Lo anterior nos lleva a la siguiente canción: She’s a rainbow de The Rolling Stones, con la cual se realiza la presentación de una Estella mayor. A diferencia de la canción anterior, en esta se mantiene un estilo y un ritmo homogéneo todo el tiempo y que incluso parece tener un ciclo pues primero hay una parte instrumental y luego una parte donde se escucha la voz del vocalista unos momentos para luego dar paso a los instrumentos de nuevo y así sucesivamente. La vida de Estella también es así, un ciclo, una repetición de eventos que parece no tener fin.
El término de ese ciclo llega al ritmo de Time of the season de The zombies, canción que marca el comienzo de la carrera de Estella cerca de la moda, algo que siempre ha amado. Si bien desde el título de la canción queda claro esa llegada del momento para hacer algo diferente, la verdadera canción que marca un antes y un después en la vida de Estella en este mundo de telas, patrones y costuras, es These boots are made for walkin’ de Nancy Sinatra. Así como Estella estuvo durante un tiempo obedeciendo las órdenes de otros, con esta canción ella hace la declaración de que es ella quien en realidad debería estar por encima de otros, no sólo por su maravilloso talento, sino porque su personalidad lo exige, y por supuesto es un requisito para el papel que representa en la película.
Estas dos canciones no vienen solas, pues el máximo paso en la carrera de la protagonista se presenta con Feeling good de Nina Simone. ¿De qué otra manera podría decirle al público que un nuevo camino está por comenzar si no es con esta icónica canción? Basta con detenerse a escuchar el coro para darnos cuenta de esto y de la satisfacción del personaje por tener la oportunidad de trabajar con la mujer más respetada de la moda dentro de la película. Añadamos a esto la sincronización de la entrada lenta de la canción con la sensación de suspenso sobre lo que encontrará la protagonista en su trabajo soñado, y de la parte estridente con el momento del descubrimiento. Un detalle muy bien pensado.
Por supuesto, todo villano necesita un cómplice para realizar sus fechorías, y aunque Estella ya tiene dos amigos que la ayudan, ninguno de ellos comparte su pasión por la moda, por lo que necesita a alguien como el personaje de Artie, un hombre con gustos extravagantes y que se siente atraído por cualquier cosa relacionada a ocasionar problemas. Estos dos personajes unidos dan como resultado una chispa, tal como dice el título de la canción Fire de Ohio Players que suena al momento de su encuentro. La letra de la canción, especialmente la segunda mitad, se relaciona mucho con este momento, y con las características anteriormente mencionadas de los personajes.
De entradas ya hemos hablado al inicio de este texto, pero esas no son las únicas que hay, pues una vez que dejamos a un lado el personaje de Estella para enfocarnos por completo en el surgimiento de Cruella como villana y protagonista de la película, nuevas cosas surgen. Entre ellas su presentación pública como la competencia a vencer en el mundo de la moda, lo cual queda más que claro con la canción The wild one de Suzi Quatro. Y sí, la canción habla sobre destacar por ser rebelde y el anhelo de ser dueño de todo.
Por si esto no fuera suficiente, One way or another de Blondie, es la declaración de guerra. Esta canción ha sido utilizada en varias series y películas y casi siempre tiene el mismo propósito: decir que el objetivo que se tiene, sea cual sea, se logrará sin importante lo que cueste. Esta canción, acompañada por las imágenes de los actos provocadores de Cruella, es una combinación única que indica el carácter competitivo y anárquico del personaje.
Como en toda historia, las cosas se enredan, los planes no salen como se desea y se necesita un momento de ingenio antes de llegar al desenlace. En el caso de Cruella, ella reúne a un grupo de amigos que la ayudan a crear un malévolo plan. Si tenemos varias personas con talento detrás de un mismo objetivo y la canción Come together interpretada por Ike & Tina Turner, la escena se convierte en un momento digno de recordar. El ritmo, la letra y la voz de Turner ¿qué más se le puede pedir a una escena de este tipo? Es por supuesto la marca de superioridad de nuestra villana, su capacidad de llamar la atención y el punto culminante del desarrollo de su personalidad.
Inevitablemente, después de las grandes entradas y los momentos memorables, la historia llega a su fin con dos canciones. La primera, Sympathy for the devil de The Rolling Stones, siendo esta la segunda canción que aparece de esta banda; a pesar de que esta canción tiene un trasfondo muy oscuro debido a lo que dice la letra, le da un cierre con ritmo a la película. La segunda, es Call me Cruella de Florence + the Machine, canción que aparece en los créditos y que recapitula la personalidad de esta villana de Disney, desde su cambio de la “inocente” Estella a la malvada Cruella, hasta su gusto en la moda y sus deseos de poder.
Cruella no es sólo una película digna de ver, sino que también cuenta con una banda sonora que tiene mucho que decir y que complementa a la perfección las acciones de este personaje.