No es novedad que las historias de algunos videojuegos sirvan de inspiración para la creación de series o películas. En el caso de Cyberpunk: 2077, su historia sirvió para inspirar un anime que sirviera como introducción y funcionara también como campaña de marketing para que la gente se animara a jugar.
Cyberpunk: Edgerunners es un anime creado por Netflix, y no sólo cuenta una buena historia, sino que también tiene un gran acompañamiento musical que logra conectar con la adrenalina, emoción y sentimentalismo que llenan esta serie.
Desde el primer capítulo, gracias a Who’s ready for tomorrow de Rat boy e IBDY, queda marcado un ambiente de despreocupación, aunque la letra va en el sentido contrario, ya que esta trata sobre el tema de madurar y los cambios que pueden presentarse en cuanto a nuestra perspectiva de la vida.
Sin embargo, esta despreocupación desaparece cuando escuchamos Major crimes de HEALTH y Window Weather. Para empezar, la melodía tiene mucha nostalgia impregnada gracias a su ritmo lento y los arreglos muy propios de la música electrónica que terminan por dar ese toque de tristeza.
La letra, por su parte, plantea algunas cuestiones existencialistas respecto al amor y la vida, todo a través de una voz que denota bastante tristeza y un poco de cansancio. No es la canción más triste de la lista, pero sí que es de esas que remiten a un estado emocional un tanto gris.
Para seguir alimentado esta nostalgia y tristeza con ritmos lentos, tenemos Let you down de Dawid Podsiadlo, uno de los artistas que más se escuchan a lo largo de esta serie justamente para musicalizar momentos que requieren este tipo de estados anímicos. Además, esta canción es la que se escucha al final de cada episodio.
En contraste con la canción del final, la canción que nos mete de lleno en cada capítulo, This fffire, de Franz Ferdinand, es sumamente enérgica gracias a esos toques del rock que llega a tener en la batería y en la guitarra, además de la energía que le imprime el artista a su letra. Curiosamente tanto This fffire como Let you down hablan de ese fuego interno que hay en cada persona y cómo la presencia o la ausencia de este nos hace sentir mejor o peor con lo que hacemos y con quienes nos rodean.
Hemos hablado del rock y de la música electrónica. Pues bien, hay una canción que une ambos géneros musicales: Sustain/Decay de Drivealone. La melodía sin duda es muy del rock, incluso con toques de punk, pero la manera en que está arreglada la voz y algunas partes instrumentales recuerdan más al género de la electrónica. Una canción bastante alegre para escuchar, aunque su letra sea un poco extraña y oscura.
Y ahora la canción que nos rompió el corazón más de una vez y que fue la responsable de crear escenas verdaderamente emotivas. I really want to stay at you house de Rosa Walton y Hallie Coggins, es una canción que combina la música electrónica con el pop para crear una melodía por partes alegre, por parte nostálgicas, manteniendo una belleza muy peculiar a lo largo de toda la canción. Por su parte la letra habla de las relaciones románticas donde no hay interés recíproco.
Para subir bastante los ánimos y la energía, tenemos Friday night fire fight de Aligns & Rubicones. Una canción que sin duda brilla por su ritmo roquero pesado y su letra rebelde. Una buena opción para soltar el estrés y sonreír un poco, además de que tiene solos de guitarra bastante buenos.
Claro que sí se quiere algo que tenga mucha más energía, tal vez para fiestear, sin duda Juss wine de P.A.F.F. y Diego Cichy Don es de las opción más acertada. Esta canción combina la música electrónica con un poco de reggae, lo cual termina por entregar una melodía con mucha alegría, ideal para bailar y pasar un buen rato.
La segunda opción para poner en una fiesta es Niewazne también de Diego Cichy Don, sólo que está vez acompañado por Martyna Baranowska. La canción tiene un ritmo más tranquilo que la anterior, pero se disfruta igual. Aquí la música electrónica pasa un poco a segundo plano, pero termina funcionando para darle a ese reggae un tono más fresco.
Ahora, la serie también tiene una selección de canciones puramente instrumentales, las cuales buscan parte del estilo directo del videojuego. On my way to hell de Poloz & Tinnitus es una de esas canciones que utilizan pura música electrónica para darle a esta historia un tono oscuro, de peligro, pero también de emoción.
Bajando un poco el ritmo y los ánimos, regresamos a la nostalgia en Nieznajomy de Dawid Podsiadlo. Esta canción está interpretada en su idioma original, el ruso, y al traducirlo tendríamos que la canción se llama “forastero”.
El ritmo lento que caracteriza a Nieznajomy acompaña una letra que habla sobre la soledad en la que uno puede terminar cuando no cuida su forma de ser con los demás y el dolor que se siente al darse cuenta de esta situación.
Para dejar atrás la tristeza de la canción anterior tenemos I will follow de Snot Abundance. Gran parte de esta canción es instrumental, gracias a lo cual se puede apreciar con mucho detalle el ritmo de la guitarra, de la batería y del pandero que les hace compañía. Sin ser demasiado enérgica, la canción termina combinando momentos del rock con algo más punk en ciertas partes cercanas al final.
Otra de las canciones instrumentales que aparecen en esta serie es The voice in my head de P.T. Adamczyk, y sí, la canción es tan oscura como suena el título. Esta es de esas canciones que podría resultar peligroso poner en la oscuridad, ya que tiene muchos elementos propios de las películas de terror.
Para algo más relacionado a adrenalina que a terror, tenemos la pieza instrumental Cyberwildlife park de Marcin Przybylowicz. Esta canción se vale mucho de la música electrónica para crear esa sensación de emoción y de velocidad. Además, hay algunas partes en las que el rock nuevamente hace de las suyas y marca un ritmo paralelo al que se venía escuchando.
Hablando de rock, el metal también está presente en esta lista. Zurawie de Ugory es una canción con un ritmo rápido y agresivo, el cual es acompañado por guturales que terminan de darle a esta canción ese toque rebelde que la caracteriza.
Además de la anterior, tenemos Night city aliens de The Armed & Homeschool Dropouts. Esta es otra canción que tiene un ritmo bastante agresivo, aunque a diferencia de la anterior, en esta hay momentos en los que los guturales se toman un descanso para dar paso a una voz masculina que canta con un poco más de suavidad.
Regresando al ritmo de reggae que se escuchaba al principio de este recorrido musical, tenemos Outro de Zjednoczenie Soundsystem. Alejada de la música electrónica, esta canción respeta como tal el género del reggae, haciendo de esta una de las canciones más tranquilas y relajantes de toda la lista.
Antes del cierre instrumental de este recorrido por el soundtrack de Cyberpunk: Edgerunners, escuchemos Where did your love go?, de Dawid Podsiadlo. Nuevamente este hombre se las ingenia para hacer esta canción que tiene cierto nivel de dolor plasmado tanto en su ritmo como en su letra, que habla del desamor.
Una gran canción que sin duda le da un toque dramático a la escena en la que aparece y que además es perfecta para escuchar en cualquier otro momento. Es de esas canciones que a pesar del tema triste que abordan, terminan por disfrutarse de principio a fin gracias a su instrumentalización que combina algunos elementos del pop, del rock y un poco del blues.
Ahora sí, para cerrar este texto tenemos Adam Smasher de Paul Leonard-Morgan. La canción se vale nuevamente de la música electrónica para construir una melodía que transmite suspenso e inquietud, con uno que otro momento de tranquilidad.
Es así como llegamos al final de este recorrido musical por el soundtrack de la serie de Netflix, Cyberpunk Edgerunners.
コメント