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La casa de papel: Música para todos los gustos, parte 1



La serie española, La casa de papel, se convirtió en un verdadero fenómeno a nivel mundial, gracias a la historia de un grupo de ladrones con nombres de ciudad que entran a robar la Fábrica de Moneda y Timbre. Pero, ¿qué es una buena historia sin un buen acompañamiento musical? No sólo la trama y los personajes de esta serie se volvieron icónicos, sino también algunas canciones que acompañan esos momentos inolvidables. Además, la música representa muy bien la diversidad, así como dentro de la serie podemos encontrar a personajes que se distinguen por su manera de pensar, de sentir y de vivir.


Así que hablemos de esa música que nos hizo bailar y cantar, reír y llorar:


Bella Ciao – Manu Pilas

Claro, no se puede hablar de La casa de papel sin mencionar esta canción italiana que se convirtió en el himno de la serie, y eso que no es la canción de los créditos iniciales. En su versión original, la melodía suena bastante alegre, aunque la letra habla sobre los momentos de la guerra, de resistencia, y funciona más bien como una carta de despedida por parte de quien va a pelear por conseguir la libertad.



Ahora bien, en su versión lenta, que también aparece en repetidas ocasiones durante la serie, la canción adquiere el tono lúgubre que se refleja en la letra, no sólo por la falta de velocidad en los instrumentos, sino también por la profundidad de la voz y de los coros que la acompañan. Además, en esta variante, la letra no se repite, a diferencia de en la versión original, por lo que también da la sensación de la lectura de una carta de despedida. Otro detalle es que la canción es mucho más corta que la original y la mayor parte es instrumental.



My life is going on – Cecilia Krull

La canción anterior no es la única que tiene dos versiones para apelar a diferentes emociones, pues esta, que aparece en el intro de la serie, también las tiene.


En su versión original, la canción empieza con un ritmo lento, un tanto nostálgico. Conforme avanza, no sólo se suman nuevos instrumentos, sino que también se combinan géneros musicales, de tal manera que la canción no sólo se apega al pop o al pop rock, sino que se mezcla un poco con la electrónica, sin llegar a ser una canción muy animada, pues siempre mantiene un ritmo lento.


Por su parte, la letra aborda el tema de seguir adelante disfrutando el presente, no preocuparse tanto por lo que pueda pasar en el futuro, sino de dejarse llevar por lo que parece correcto al momento de tomar una decisión.



En su versión roquera, la nostalgia queda atrás y ahora queda la sensación de ser los dueños del universo. La instrumentación cambio por completo y esta vez no hay una combinación con otros géneros. De esta manera, lo único que se puede escuchar son las guitarras, (las cuales tienen solos muy buenos), y la batería acompañando a Krull quien canta con más energía que en la versión anterior.



Ca plane pour moi – Plastic Bertrand

El inglés y el italiano no son los únicos idiomas presentes en la música. Como prueba tenemos esta canción francesa que tiene un ritmo muy pegajoso y enérgico gracias a la excelente combinación de ritmos entre las guitarras, la batería y unas trompetas que se escuchan en las partes del coro. Así mismo, la velocidad con que el vocalista canta la letra, se adapta muy bien a ese ritmo, lo cual da una sensación de armonía muy especial.



Guajira guantanamera – Company Segundo

Otro idioma, por su puesto, es el español, y aunque hay varias canciones en este idioma, seguramente una de las más representativas es esta, pues sale en más de una ocasión durante las últimas temporadas. Con su ritmo caribeño y su letra que dice poco y mucho a la vez, la canción resulta refrescante y alegre. ¿Quién se puede resistir a bailar esta canción?



Bamboo moon – The mutants

Por último, tenemos el japonés, el cual se mezcla con el inglés en esta canción que consigue un equilibrio entre la tranquilidad y la felicidad, pues mientras que la melodía es lenta por partes, con un toque de viejo oeste, la voz de la vocalista le da toques de alegría por la manera en que canta la letra, donde parece combinarse una historia mágica con un anhelo por la libertad.


Más allá de la diversidad de idiomas que se puede apreciar en el soundtrack de La casa de papel, hay también diversidad de géneros, de épocas y de emociones generadas por la música, pero eso ya quedará para otra ocasión.




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