Joji, el personaje que se convirtió en todo lo que no se pensaba, poco me corresponde a mi hablar de él como artista, persona o personaje. Hace apenas 24 horas se estrenó SMITHEREENS, el tercer álbum solista de George Miller, mejor conocido como, uno de tantos alias, Joji.
Abriendo con “Glimpse of us”, la balada del año, comienza de manera fuerte, dando ese tono de nostalgia, melancolía y dolor que diseminará por todo el álbum.
Ya bien conocidas son las canciones de desamor de Joji, esa inmersión dentro del dolor del rompimiento, de las posibilidades no logradas, las promesas no cumplidas y el lenguaje secreto de una relación terminada.
“Glimpse of us“ es la constante de una persona no superada, el recuerdo intermitente de un ser que no se va, incluso cuando su lugar ya fue ocupado por alguien más y que Joji evoca de manera magistral con su voz.
La duración del álbum es corta, apenas unos escasos minutos que llegan a ser quizá demasiado cortos. La segunda canción que presenta es “Feeling like the end”, un pequeño recordatorio de las cosas que quedaron pendientes al termino de una relación, rápido reclamo de todas las cosas que se compartieron entre dos personas y la promesa de un camino juntos que obviamente no se logró.
La tercera canción, una de las más potentes, “Die For You” llega a ser un canto ahogado del amor bailando solo, una despedida dolorosa a alguien que ya no está, alguien que ya está con alguien más, algo que se acepta, incluso a aunque duela un poco.
Aprender a soltar, a dejar ir y aceptar que ya pasó, incluso cuando todavía se guarden sentimientos, estoica aceptación de algo que ya no depende de uno, aunque moriría porque así fuera. Joji no pierde el toque para canciones desoladoras.
“Before the day is over“, es quizá una de las más crudas canciones, el enfriamiento inminente de una relación entre dos personas que se vislumbraba en el horizonte, un canto al momento desvanecido, no se espera una recuperación real, es más un canto necesario para poder aceptar el fin, esperar a poder hacer algo antes de que termine el día, sabiendo que es el último barco, no hay más, nada más.
“Dissolve'' comienza con un sonido acústico, distinguible dentro de lo que hace Joji. Es el pedido de auxilio de alguien que pide un tiempo de paz, evocando a alguien que funciona de remolque. Una relación complicada ante una situación condenada, Joji no decepciona en cuanto a recolección de situaciones desesperadas. La voz acoplada justo en “until we dissolve” brinda la medida justa de atención y búsqueda retórica de una solución.
“Night Rider“ comienza lo que es la segunda parte del álbum y es un cambio total de sonido y línea en la que venía moviéndose el álbum, probablemente la otra manera de ver una situación ya establecidas en las canciones anteriores, encontrando en esta ocasión una manera resignada, una forma de melancolía aceptada.
“Blahblahblah (demo)“ es una corta canción, donde el ritmo es el protagonista pero que despierta la única esperanza, el regreso, la juventud, la posibilidad de volver a sensaciones ya vividas y extrañadas, imágenes de momentos específicos, esperando que no se pierdan, sino que se eleven en la posibilidad, en la persuasión.
“Yukon (Interlude)“ es una canción lenta que comienza a evocar un recuerdo y que pronto llega a un ritmo emocionante, acelerado y constante. Es un, como el título lo dice, interludio perfecto vestido de aceptación, recordando todos los momentos que pasó recordando, deseando otras posibilidades, en un estado lleno de melancolía pero que hoy ya están atrás, se acepta el camino y odiseo llega a donde debía llegar.
"1AM FREESTYLE" es la ultima canción, el cierre de un lo que parece un camino sinuoso que llega a despegarse, es la última carta de solicitud, una suerte de statement, puedes hacerlo pero podemos hacerlo mejor juntos, si tan sólo quisieras... Pero no quiere y se despide.
Joji brinda a quien conoce su música un grupo de nuevos temas cortos que acompañan el tránsito de una pérdida, ruptura, desolación. Expresando las palabras punzantes, cortantes, precisas y determinadas a una situación más común de lo que se pensaría.