Una ciudad gris de la que no se puede salir, llena de fantasmas del pasado y que refleja el alma. Esas pocas palabras podrían resumir Prisions Imaginaires, disco de la banda punk francesa Syndrome 81, estrenado el 25 de mayo de este año.
Vivre et mourir dans cette putain de France (Vivir y morir en esta pinche Francia)
Con este primer disco de larga duración, la agrupación que nació en el 2013 presenta 12 canciones de punk melódico, con toques de punk hardcore y de post punk. Un interludio hablado divide los temas en dos partes iguales, y nos da así un respiro antes de volver al frenesí de los instrumentos y de una voz inteligible (lo que se agradece en este género), pero cuyas palabras transmiten la melancolía y la falta de esperanza propias de una ciudad portuaria muy alejada de París y que se tuvo que reconstruir tras los bombardeos alemanes de la Segunda Guerra Mundial.
Une pluie froide et sans fin s’abat sur la ville (Una lluvia fría y sin fin cae sobre la ciudad)
Vivre et mourir empieza este álbum y marca la pauta con sus arpegios de guitarra y su letra nihilista: uno nace y muere en el mismo lugar, sin que nada cambie. Sentimiento parecido al de avenir, en el que se repite que en las orillas del Penfeld, todos terminaremos como ratas.
Aun así, no todo es oscuro a lo largo de los doce temas, como se puede escuchar con dans les rues de brest, en la que el cantante parece recordar con felicidad esas calles de Brest, en las que quemó su juventud.
A pesar del aspecto personal de las letras, marcadas por su ciudad de origen, la agrupación francesa consigue tocar temas universales con una música lo suficiente variada, sin perder en coherencia, para no volverse aburrida. Cabe destacar lumières magnétiques, canción que cierra paysages urbains con sonoridades mucho más cercanas al cold wave que al punk del resto de esa entrega.
Si quieren descubrir Prisions Imaginaires, pueden escucharlo (y descargarlo al precio que gusten) en la página bandcamp de la banda.