Fotos: Brenda Rendón
¿Qué es la música si no una manera de expresar lo que sentimos y conectar con los demás? El año está a punto de terminar, 12 meses marcados por el regreso de los (tan extrañados) conciertos que nos permitieron compartir nuevamente música al lado de nuestros amigos y uno que otro desconocido que cantaba las mismas canciones que nosotros.
Nosotros tuvimos la oportunidad de asistir a uno de los últimos shows del año, pues Axel Catalán y Apache O’Raspi nos ofrecieron una melancólica noche en el tradicional Beat 803, el cual sobrevivió a casi dos años sin actividad, sin embargo, parecería que el tiempo se congeló y nada hubiera pasado a su interior.
2021 ha sido un año diferente, siendo el segundo de una pandemia mundial trajo bastantes cambios a la vida de todos, si tuviera que describirlo en una palabra sería precisamente melancolía, un sentimiento de añoranza a la vida antes del covicho, pero a la vez una incertidumbre de lo que nos espera a futuro, sentimientos que se plasmaron a través de la música de estos artistas.
A pesar de que era domingo, desde las 7 p.m. la gente comenzó a llegar al Beat 803, el frío decembrino (y la falta de ponche) no impidió que los fans llegaran temprano ansiosos de poder cantar a todo pulmón los éxitos del cantautor.
Conforme empezaron a entrar nos percatamos de que el foro tuvo un lleno total, la gente se mostraba alegre, platicando y riendo entre ellos, realizando sus predicciones sobre que temas esperaban escuchar, su último concierto y la emoción de encontrarse en ese lugar.
Los ánimos e impaciencia no hacían más que subir conforme pasaba el tiempo, y así cuando el reloj marcó 9:30 los amplificadores se encendieron, sonaron los primeros acordes, se levantó el telón y ante los aplausos del público llegaba Apache O’Raspi al escenario.
Un dúo originario de Michoacán que supo conectar con el público poblano a través de sus melódicos y calmados ritmos que nos invitaban a relajarnos y llevar por las melodías e interesantes letras.
Un emotivo momento se presentó cuando sonaba Edna, tema que nos confesó se lo compuso a su madre como regalo para un 10 de mayo y que a más de uno le hizo recordar buenos momentos.
El dúo comentó que se encontraban de gira con Axel, lo cual les había dado experiencias interesantes, pues en Michoacán una fan les regaló una canasta de aguacates, por lo que regalarían algunos al terminar el show y posteriormente comenzaron a tocar Fronda, tema dedicado a los árboles.
El tiempo voló y antes de que nos percatáramos la noche cerraba con Rapante, tema dedicado al escritor italiano Italo Carvino, y Cantar del Jilguero, el cual puso a todos los asistentes a aplaudir y sonreír al hacer una inesperada combinación con “La del moño colorado”.
Para sorpresa de todos Axel Catalán apareció en el escenario, y justo cuando pensábamos que haría un feat con la banda, Apache O’Raspi se despidieron momentáneamente y acompañaron en el bajo y la guitarra a Catalán en su presentación.
Eran las 10 de la noche cuando comenzó a sonar “Los Amantes”, tema que de inmediato puso al público a cantar a todo pulmón, la emoción era evidente y los sentimientos estaban a flor de piel con la gente que se encontraba más que emocionada con la música.
Se formaba un contraste interesante, pues si bien la gente se mostraba efusiva y que realmente sentía las canciones, el aire de la música era melancólico, haciendo que nos perdiéramos en los acordes recordando algunos tiempos mejores con temas como perro viejo, ansiedad, fuego, austero o paz mental.
Los fans no dejaban de cantar los temas, sin embargo, el primer subidón de energía llegó con “Valer verga” una de sus canciones más conocidas la cual levantó a todos de sus sillas para cantar un rato y olvidarse de lo demás.
¿Qué es la música si no una manera de expresar lo que sentimos y conectar con los demás? Situación que se vivió perfectamente, pues de repente los asistentes se encontraban abrazando, riendo y cantando las canciones, algo que sin duda ningún streaming va a igualar.
El show estaba terminando cuando, a pedido del público, sonaba “bonita” la cual no fue cantada por Catalán, sino por el público que demostraron que tanto les gustaba la canción al no perder ni uno solo de los versos.
Parecía que el concierto había terminado, pero ante la insistencia de los fans que pedían “otra” la banda regresó a interpretar “Antes” y agradeció a todos por asistir y compartir nuevamente la música.
Así luego de una hora de múltiples emociones el telón bajaba nuevamente, las luces se encendían y cerraba uno de los últimos conciertos del año, el cual nos dejó con ganas de más.
Luego de lo que pareció una eternidad sin conciertos, estos últimos meses hemos podido compartir nuevamente la música en vivo, un sentimiento sin par que esperamos pueda continuar por mucho tiempo, cuídense y felices fiestas, nos estaremos leyendo pronto.